Leandro Araya, de Quintero a Quilpué para titularse de Ingeniero Civil Mecánico

19.01.2023

Leandro Araya Mena hizo la carrera viviendo en Quintero. Se levantaba a las 5.30 de la mañana, para tomar la micro a las 6 am. La primera micro era hasta Viña, la segunda era de Viña a Quilpué. Sólo así podía llegar puntual a clases de 8.15 am en la Escuela de Ingeniería Mecánica PUCV.

“Era un poco desgastante”, dice. Pero llegó hasta el final de la carrera y hoy terminó la etapa de vida estudiantil. Defendió su tesis llamada “Proyecto de monitoreo por condición y en tiempo real para la predicción de fallas en bombas centrífugas de Codelco – división Ventanas”.

En la tesis estudió cómo evoluciona el desgaste de los componentes de bombas centrífugas, para tomar decisiones en vistas a saber cuándo hacer mantenimiento.

Pero su memoria viene de más atrás. Comenzó con su ingreso a Codelco Ventanas el 2021. Se interesó y comenzó la memoria ahí mismo; la terminó en abril 2022, mes en que comenzó a trabajar en una empresa de mantenimiento predictivo y vibraciones, Atecma, mientras redactaba el documento de la memoria. En diciembre terminó la redacción de la tesis y acabó el trabajo en Atecma. Ahora está libre para buscar nuevos horizontes donde siga creciendo como profesional.

¿Qué es lo que más te ayudó de tu paso por la universidad?

La amistad que se genera en la Escuela. Te permite desarrollarte de una forma distinta en comparación con otras universidades. En otras Ues hay cierta competencia con los compañeros, en cambio aquí nos apoyamos. Eso es lo que más destaco en la Escuela.

Además de estudiar, participó en proyectos con compañeros, como el de un aerogenerador que iba a funcionar sin partes rotativas. También viajó a Francia el 2018 con una beca de la PUCV, para un intercambio estudiantil en la Universidad de Lyon. “Fue una experiencia muy buena”, dice.

Todo esto lo hizo compatible con los trabajos que tuvo durante los años de estudio: participó en el programa de tutorías de la PUCV, hizo clases particulares de matemáticas y de física, trabajó en la biblioteca de la Escuela, entre otras cosas. Todo valía la pena. Hoy vino a la defensa de la memoria con su familia y polola, quienes quisieron estar presentes en este último paso de la carrera de Ingeniería Civil Mecánica.

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