La Facultad de Ingeniería de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso tiene más de 80 años de tradición. Por sus distintas Escuelas han pasado miles de estudiantes que hoy están construyendo la historia actual de la ingeniería del país. Estudiantes que han hecho su vida universitaria en los pasillos de la que fuera la primera Facultad de la PUCV, antiguamente llamada “de Industrias”. Queremos rescatar las historias de estudiantes que, a través del tiempo, han pasado por las salas de la Facultad de Ingeniería de la PUCV y que hoy están aportando, desde su área de conocimiento, a resolver los grandes problemas de la sociedad.
El Intendente regional Gabriel Aldoney es Ingeniero Mecánico de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso y Magister en Administración de Empresas de la Universidad Politécnica de Madrid. La máxima autoridad de Valparaíso, quiso contarnos cómo fue su paso por la Facultad de Ingeniería de la PUCV.
La época en que a mí me correspondió ser estudiante de la Universidad Católica de Valparaíso era tan distinta a la de hoy. En primer lugar la Facultad de Ingeniería no existía como tal. Fue precisamente uno de los logros en un tiempo muy intenso que nos tocó vivir como jóvenes. Ahí estuvo el proceso de reforma universitaria que comenzó en el año 1967 y que dio como resultado, entre otras cosas, la restructuración académica de la Universidad, naciendo precisamente la Facultad de Ingeniería. Se concibieron además otros procesos tremendamente importantes, como fue la elección democrática de las autoridades de la Universidad, la generación de la carrera académica, el reforzamiento de la investigación, la vinculación de las escuelas profesionales con los institutos donde se centraba la ciencia, etc. Por lo tanto, lo que puedo decir es que fue un período de formación como ingeniero en un momento muy particular de la historia de la universidad, que trajo a mi juicio muchos beneficios posteriores en el desarrollo universitario del país y por supuesto de la propia Universidad.
Lo primero que tengo que aclarar, es que a mí la formación que obtuve en la Universidad Católica de Valparaíso me ha servido mucho en el ejercicio profesional y en mi vida. Fue una formación muy seria desde el punto de vista de la profesión, partiendo desde lo básico hasta lo profesional, pero también desde el punto de vista humano. Nosotros nos distinguíamos en ese entonces, por ser ingenieros con una visión distinta al de otras universidades, donde los aspectos humanos -hoy día se llaman blandos- tenían mucha relevancia. Y eso me sirvió muchísimo a mí, incluso en lugares donde por causas políticas tuve que vivir, como es el caso de mi permanencia en Alemania, donde fui ingeniero del Departamento de Desarrollo de Despacho de Aviones del Aeropuerto Frankfurt, donde mi formación fue un factor muy relevante, en que con el tiempo, a medida que iba dominando el idioma, alcancé una experiencia profesional muy importante.
Uno pudiera pensar que como Intendente de la región, la ingeniería juega un rol secundario y que la política es lo principal. La verdad es que tengo que decirles que sí, pero también debo decir, que la política sin contenido técnico, desde mi punto de vista, pierde lo esencial que es la de intentar, procurar o buscar soluciones que sean las mejores, en este caso, para el desarrollo de la región y la solución de los problemas que la ciudadanía tiene. Por lo tanto, el hecho de yo tener una formación en ingeniería, me permite mirar con ojos distintos quizás, a quienes creen que los problemas solo se resuelven a través de la política, de proyectos tan importantes como por ejemplo, el desarrollo de los sistemas de transporte a través de Merval, los grandes proyectos de inversión como son todos los que están relacionados con el sector hídrico. También en temas de gestión, donde muchas veces hay que aplicar conceptos que van más allá de la política y que tienen que ver con soluciones técnicas. Y en este sentido, el hecho de que yo haya tenido precisamente una formación equilibrada, entre lo que son los conceptos técnicos y el papel más social que debe cumplir un ingeniero, me han sido muy útiles en el ejercicio del cargo de intendente.
Lo primero que tengo que decir, es que no solo porque existe la Facultad de Ingeniería de la Universidad Católica de Valparaíso sino porque hay varias universidades que han conformado una oferta universitaria de la Quinta Región, que afortunadamente tiene niveles de calidad, es que son reconocidas no solo en el país sino que internacionalmente. De hecho yo acabo de tener una gira por Panamá donde hubo una delegación universitaria muy numerosa, que permitió promover en ese país, precisamente los principales atributos que este sistema universitario tiene en la región, y también lo es, porque las propias universidades han desarrollado proyectos en otros países que le ha dado mucha presencia a lo que es el sistema universitario de la región, y en ese sentido la Facultad de Ingeniería de la Universidad Católica es una unidad que se destaca entre las facultades de ingeniería del país.
Yo creo que en general los ingenieros están hoy día sometidos a un proceso que en la práctica significa tener que enfrentar una mejora continua. Son tantos los avances y los desafíos que van surgiendo, las modificaciones tecnológicas, de procedimiento, en fin, que un ingeniero, y particularmente un profesional de la Universidad Católica de Valparaíso debe estar preparado para enfrentar y esto implica estar capacitado para una permanente actualización. En el caso de la región, esto se demuestra por ejemplo en los desafíos que tiene respecto a la solución de sus problemas. Nosotros somos una región que competimos con la Metropolitana. En ese sentido debemos ser capaces de tener una región con proyectos que sean, insisto, competitivos con la Metropolitana, en el ámbito del transporte, en infraestructura y en la capacidad de poder atraer otras actividades, particularmente relativas a la industria de la innovación. Son desafíos bien relevantes para la región, que hoy en día están siendo enfrentados con una visión muy distinta a la que ocurría en el pasado, en el aspecto de que en la región existe cada vez más el convencimiento, de que tenemos capacidad para poder generar este tipo de proyectos, que puedan competir con la inversión que hay en la Región Metropolitana. Por ejemplo, algo que señalé en una respuesta anterior. El desarrollo del transporte de pasajeros de Merval. Nosotros tenemos que pensar en un sistema mucho más extensivo de red de Metro que hoy día solamente la tenemos en superficie y que no es suficiente como para enfrentar las demandas, incluso actuales que tenemos, que se expresan a modo de realidad con el creciente atochamiento o congestión que se está generando entre Valparaíso y Viña del Mar y las comunas del interior. También hay otros desafíos como son en el ámbito del recurso hídrico. La región está en medio de un proceso de sequía, que se ha extendido mucho más allá de lo que han sido otros períodos de falta de lluvias, lo que nos obliga a modificar los métodos que nosotros utilizamos, no solo para captar agua, distribuirla, transportarla, almacenarla sino también para usarla. En ese ámbito hay un amplio campo de investigación, de innovación que tenemos que ser capaces de introducir en la región. En torno a la innovación, hoy día hay muchas experiencias, particularmente en muchachos jóvenes, como asimismo en el ámbito de la robótica, en las comunicaciones, en procesos de gestión y en diseño industrial. En fin, hay un campo enorme de desarrollo y en ese sentido Valparaíso cumple con las condiciones, tanto desde el punto de vista de la calidad de los procesos universitarios como de las posibilidades urbanas que ofrecen las ciudades de la región de Valparaíso, para que este sea un sector que vaya avanzando y desarrollándose aún con más fuerza.
Escuela de Ingeniería Mecánica