Skip links

Comienza segunda versión del proyecto de alternancia liderado por Mecánica PUCV

Con una apuesta concreta por la articulación entre la educación secundaria técnica y el entorno universitario, la Escuela de Ingeniería Mecánica PUCV dio inicio a la segunda versión del proyecto de alternancia con establecimientos de Educación Media Técnico-Profesional (EMTP) de la Región de Valparaíso.

Se integraron al programa los primeros estudiantes del Colegio Industrial Andrés Bello López, quienes comenzaron sus sesiones en los talleres y laboratorios de la Escuela, accediendo a equipamiento especializado y acompañamiento académico directo. En agosto se espera la incorporación del Liceo Industrial de Valparaíso, ampliando el alcance de esta iniciativa que fortalece la formación técnica en contextos reales de aprendizaje.

El proyecto es impulsado por la Escuela de Ingeniería Mecánica en colaboración con la Red Futuro Técnico, Fundación Chile y la Vicerrectoría de Vinculación con el Medio de la PUCV, en el marco de una estrategia institucional que busca estrechar la relación entre la universidad y los territorios, promoviendo experiencias formativas significativas para estudiantes de enseñanza media.

La Escuela de Ingeniería Mecánica es pionera en este modelo, siendo parte de la primera universidad en la región en implementar la alternancia reconocida por la Red Futuro Técnico y Fundación Chile. Durante 2024, la experiencia ya ha beneficiado a más de 90 estudiantes de Cartagena, Viña del Mar, Valparaíso y Quilpué, en un proceso respaldado por el Ministerio de Educación.

El académico Álvaro González, responsable de la iniciativa, explica que “esta experiencia les permite a los estudiantes alternar su espacio educativo en nuestras instalaciones, accediendo a tecnología, laboratorios y al trabajo conjunto con nuestros docentes, profesionales y ayudantes”.

Desde los establecimientos participantes, también valoran la oportunidad. Gonzalo Cantuarias, jefe de Formación Técnica Profesional del Colegio Andrés Bello López, sostuvo que “la infraestructura de la Escuela y el conocimiento que se entrega en cada sesión enriquecen notablemente la experiencia de nuestros estudiantes, acercándolos al mundo universitario desde una perspectiva técnica y aplicada”.

La iniciativa se enmarca en el compromiso sostenido de la Escuela de Ingeniería Mecánica por aportar al desarrollo regional desde la formación, la innovación y la vinculación con el entorno. Para 2025, se proyecta la incorporación de otras unidades académicas, lo que permitirá diversificar y robustecer aún más la oferta formativa para los liceos técnico-profesionales de la región.